Nunca he pensado que fuera tan difícil y complejo
definir quien soy yo. En este momento casi angustiante me deparo con una
seguridad, a de que necesito escribir sobre algo que solamente yo sé. Percibo
que nadie puede ayudarme, pues soy para los otros aquello que quiera ser. Cada
uno tiene su visión particular sobre mi. En el trabajo soy seria, fría, dura,
como toda abogada que se estima, pero con mis amigos soy meiga, dulce, llena de
bromas. Como solicitar que alguien hable quien soy yo? Si me invento y
reinvento a cada momento?
Soy callada y reservada cuando debo ser. Soy alegre,
extrovertida, espontanea cuando estoy entre mis amigos, mis cariños, mis
amores… no soy siempre igual, mismo sea siempre la misma. Los mismos ideales,
los mismos principios, los mismos valores. A veces riendo… a veces seria… pero
los mismos principios.
Ahora sin alternativas, recorro al espejo y veo….
Reflejo a delante al espejo. Veo mi exterior. Veo mi juventud y madurez a los
27 años. Fue todo tan rápido… los años pasan… pero quiero ver además de lo que
mis ojos permiten. Quiero ver por dentro de mis ojos… busco en ese momento por
mi alma… y con ella los recuerdos. Y empiezo a recordar.
Recuerdo de los amores que tuve. De los amores que he
amado de lejos. De los amores que he amado y fui correspondida. De los amores
que tuve tanto miedo de perder que he perdido y fue con esa pierda que yo me
sentí adulta por la primera vez. Recuerdo que fue en ese momento que he dejado
de ser más chiquita y pasé a ser más mujer. Acuerdo de tener sido tan fuerte
cuando yo creía tan débil.
Acuerdo de los miedos… miedos tontos e infantiles.
Acuerdo de las personas que he causado dolor y de las que me causaron… acuerdo
que ya me he arrepentido de causar aflicción… y ya he perdonado… me veo en
noches llorando sin lograr dormir y en noches que reí tanto que no he logrado
dormir… y de noches y tantas noches que dormí como una piedra.
Acuerdo de tantas cosas y personas en que he creído.
Acuerdo de verdades y mentiras que ya he dicho… y que ya he oído… acuerdo mucho
de tener añoranza. Acuerdo de creer en el amor y me decepcionar. Acuerdo de
creer en el amor y tener seguridad que él existe. Acuerdo que ya hice muchas
locuras para ver un amigo feliz… para ver mi madre feliz… para ver mi hermana
feliz…
Acuerdo de ya querer sumir. Acuerdo de creer que
estaba todo dando equivocado y en el final he descubierto que todo estaba dando
cierto. Acuerdo de caer y de superar las caídas.
Acuerdo de fingir no me importar y de llorar mucho por
me importar. Acuerdo de reír y reír mucho. Acuerdo de los amigos que tuve y
tengo, de los antiguos a los más recientes… los que veo a cada día y los que
poco encuentro. Acuerdo de las crisis de risa y lloro que ya tuve con ellos. Acuerdo
de las personas que he perdido. Y lloré. Es muy triste ser obligado a alejarse de alguien
querido.
Acuerdo de soñar… soñar mucho… y acuerdo de realizar.
Acuerdo de pedir a Dios algo con tanta fe y, principalmente, acuerdo de las
veces en que fui atendida.
Percibo que soy la suma de las experiencias que tuve y
que voy tener. Soy la mistura del que vino conmigo en la esencia de mi alma,
del que he aprendido con mi familia, del que
he vivido, de los libros y poesías que he leído, de las personas que he
conocido.
Mi vida es un cubrecama de retazos que nunca acaba.
Siempre estoy aprendiendo algo nuevo. Añadiendo nuevas informaciones a las ya
existentes. Estoy en proceso de madurez, de crecimiento para me tornar cada vez
más adulto. Sé que la vida es una constante mutación. No existen formulas. Soy
mitad razón y mitad corazón.
Estoy cada vez más aprendiendo que mis equívocos son
las lecciones que necesito tener para acertar más. Y que las piedras en mi
camino y las dificultades serán siempre contornadas. He aprendido que no
adelanta yo querer patear las piedras. Duele. Soy adulta y puedo no saber las
respuestas pata todo, hasta porque nunca sabré todo, pero sé que puedo cambiar
siempre mi rumo… de destino… es sólo querer.
Lo importante es que estoy siempre con una sonrisa en
mi cara, con paz en el corazón y con una única seguridad: si yo caer, si la
caída fuera muy alta, eso sólo me hará aprender a volar.